domingo, 3 de enero de 2010

LXXXIX El Horchits.

Os contaré la historia de un buen hombre que el día que salió de la cárcel después de pasarse 27 años preso por un crimen que no había cometido le atropelló un taxi. No murió, pero quedó gravemente herido, después de 1 año logró recuperarse. Para celebrarlo se emborrachó tranquilamente pese a que los médicos le aconsejaran lo contrario, era invierno y el tipo apenas iba abrigado, entre la tontera, el colocón y el intenso frío se constipó; combinó el hipo con un estornudo inesperado enorme con tan mala suerte que se fracturó una costilla; hacía horas que le habían dado el alta pero volvía a ser ingresado acabando días más tarde envuelto en un corsé apenas sin poder moverse. Al salir del hospital, mirando a semáforos y muy bien abrigado, muy cauto él, se encontró con un amigo al que todo el mundo llamaba el “Filosus”. Su amigo era un filósofo de la calle, de experiencias cotidianas.

- ¡Horchits! ¡Pero qué haces tú aquí! ( Horchits, así es como le llamaba)
- Hombre Filosus, ¡cuánto tiempo! Pues ya ves, ya estoy por aquí de nuevo. Ya salí de la cárcel donde me han tratado muy bien por cierto.
- Pero Horchits, ¿cómo que te han tratado bien?, si has estado encerrado 27 años injustamente; ya me he enterado de lo del ADN y demás...
- Ya bueno… pero un fallo lo puede tener cualquiera.
- Ay… es que no tienes sangre en las venas, ¡tienes horchata! ¡De tan bueno que eres cansas, aburres, absurdes! Ay horchatas, horchatas… ¡no cambias eh! Bueno ¿y que llevas ahí puesto? ¿Te puedo firmar?
- Es un corsé, es que el otro día me fracturé una costilla porqué estornudé muy fuerte.
- ¡No me digas! Pues yo de esto de los estornudos sé bastante. Mira… he aprendido que si tratas de contener un estornudo, puedes romper un vaso sanguíneo en la cabeza o el cuello y morir. También sé que es imposible estornudar con los ojos abiertos; y sobretodo esta última. ¡No hay mayor putada que estornudar mientras estás meando! ¿A qué sí, a qué sí? Jajaja (se carcajeaba el Filosus).
- Cuanto sabes Filosus, cuanto sabes de la vida…
- Mira el otro día estuve en el zoo con mi sobrina y comprobé que los elefantes son los únicos animales que no pueden saltar, que el único pájaro que no camina es el gorrión, ¡que salta! jaja, que la orina del gato brilla bajo una luz ultra-violeta, que el ojo de una avestruz es más grande que su cerebro, también me di cuenta que el "cuac" de un pato no produce eco y nadie sabe el porqué. Y también pude comprobar algo bastante interesante…
- ¿Ah sí?, ¿y qué es?
- Que los delfines y los humanos son las únicas especies que hacen el amor por placer.
- Jo, ¿y eso cómo lo comprobaste?
( Silencio)
- Jo, siento habértelo preguntado… perdona…
- Jajaja ¡es qué ves como eres un horchatas! jajaja
- Ay Filosus, Filosus, bueno me tengo que marchar…
- Vale, Horchits pero antes de irte te diré una última cosa… cierra bien la boca esta noche porque el otro día leí que durante el tiempo medio de vida de una persona, mientras duerme, se habrá comido un surtido de 70 insectos y unas 10 arañas.
- Venga, adiós. (Se despidió con cara de asco el Horchits)

De vuelta a casa se encontró con un vecino ya mayor. Cuando aquel hombre se vio allí metido en el ascensor con el ex presidiario se puso tan nervioso que se desmayó, cayó, se estropeó el señor, se estropeó el ascensor, se quedó encallado entre 2 pisos y se activó una alarma ensordecedora. El Horchits intento salir rápidamente del elevador para pedir ayuda, con tan mala suerte que le vio la mujer del hombre accidentado, creyendo entonces que escapaba lo denunció, lo detuvieron y le condenaron de nuevo por error. Se pasará otros 17 años interno por intento de homicidio.


Desde la cárcel, resignado pero feliz, este año y por muchos años más te desea a ti y a todos una feliz navidad y un muy prospero año nuevo.