La semana pasada estábamos trabajando el tema de Sociales de
“Nuestro pasado reciente” con lo que yo les dije a mis alumnos que preguntaran
a sus abuelos o bisabuelos sobre cómo era la vida antes y que si podían,
trajeran alguna foto antigua, así la comentaríamos entre todos en clase.
A todo esto, Brisa, una niña de 8 años, nos trajo unas
cuantas fotos, las fuimos comentando hasta llegar a una, con el papel bastante
carcomido por el tiempo, en la cual salían fotografiados sus bisabuelos uno al
lado del otro, tranquilos y felices. Al mirar y remirar aquella imagen algo en
el reverso de la foto me llamó la atención... algo allí se escribía y conseguí a
duras penas leerlo:
“Recuerdo cuando éramos jóvenes. ¡Qué tiempos aquellos! ¿Los
recuerdas?, salíamos, entrábamos, reíamos, nos divertíamos… en una sola palabra;
vivíamos aunque no comíamos, el motivo no era nuestro amor, sino que no
teníamos. Ahora ya todo acabó. No salimos, no entramos, no reímos, no bailamos,
en resumen; no vivimos. Ahora bien, comemos y reñimos.”